Carta abierta
No sé por dónde empezar, pero ésto va a ser lo más sincero que te he escrito en mi vida, no lo vas a leer, y me da igual. No me entendiste, y decidiste acabar con todo, me dijiste adiós, y ni siquiera en persona, así de valiente fuiste, tanto tiempo intentando darme lecciones y resulta que eres peor que yo en algunos aspectos.
Un mensaje recibí días después de que me abandonaras, palabras inútiles, palabras falsas, mentiras. Sí, mentiras ¿no presumías de sinceridad? No, era necesario que yo supiera que no me habías abandonado por nadie en concreto, que no tenías la cabeza ni el corazón para otra persona. Mentiras. Me llegaste a llamar, echabas de menos algunas cosas, decías. Mentiras. Estabas intentando renovar tu vida, felicidades, lo conseguiste. Hubo un momento en que no pude más y renuncié a escribirte, a llamarte, a hablar con tus amigos, todo lo que intenté no sirvió de nada. Y cuando me "olvidé" de tí durante unos días, me escribiste, echándome en cara porqué no me comunicaba contigo de la forma que fuera. Hipocresía.
Maldad. Maldad para escribirme algo echándome en cara que te intentara olvidar. Maldad para intentar hacer que no me olvide de ti. Maldad para jugar conmigo. Mentiras. Mentiras y más mentiras. Te recordaré siempre. Mentiras. No pensaré en otro. Mentiras. De la mano vas ya con otro, quizás sea una maldición personal, parece que no logro marcar a la gente lo suficiente. Gracias por olvidarte de mi mientras pretendías que yo no me olvidara de ti. Gracias a mis amigos que lo sabían y no me lo dijeron. Traición. Una traición que me quema por dentro.
Gracias a todos, me habéis hecho sentir odio. Odio como nunca he sentido, y a tí, a la que va dirigida la carta, te detesto. Y a vosotros falsos amigos, falsos defensores de la verdad, personas que se convierten en arena insignificante ante mis ojos, a vosotros os llamo Judas.
Odio y traición, gracias a todos por hacerme sentir esto.
Un mensaje recibí días después de que me abandonaras, palabras inútiles, palabras falsas, mentiras. Sí, mentiras ¿no presumías de sinceridad? No, era necesario que yo supiera que no me habías abandonado por nadie en concreto, que no tenías la cabeza ni el corazón para otra persona. Mentiras. Me llegaste a llamar, echabas de menos algunas cosas, decías. Mentiras. Estabas intentando renovar tu vida, felicidades, lo conseguiste. Hubo un momento en que no pude más y renuncié a escribirte, a llamarte, a hablar con tus amigos, todo lo que intenté no sirvió de nada. Y cuando me "olvidé" de tí durante unos días, me escribiste, echándome en cara porqué no me comunicaba contigo de la forma que fuera. Hipocresía.
Maldad. Maldad para escribirme algo echándome en cara que te intentara olvidar. Maldad para intentar hacer que no me olvide de ti. Maldad para jugar conmigo. Mentiras. Mentiras y más mentiras. Te recordaré siempre. Mentiras. No pensaré en otro. Mentiras. De la mano vas ya con otro, quizás sea una maldición personal, parece que no logro marcar a la gente lo suficiente. Gracias por olvidarte de mi mientras pretendías que yo no me olvidara de ti. Gracias a mis amigos que lo sabían y no me lo dijeron. Traición. Una traición que me quema por dentro.
Gracias a todos, me habéis hecho sentir odio. Odio como nunca he sentido, y a tí, a la que va dirigida la carta, te detesto. Y a vosotros falsos amigos, falsos defensores de la verdad, personas que se convierten en arena insignificante ante mis ojos, a vosotros os llamo Judas.
Odio y traición, gracias a todos por hacerme sentir esto.
2 comentarios
Señor del Caos -
COL
claudia -
me tienes para lo que quieras
muackssss